La pesca ha sido una actividad que se practica desde nuestros ancestros para la recolección de comida y que es comúnmente ejercida por los hombres, pero en una ciudad de Chile llamada Valdivia se encuentra una chica que no se siente atemorizada por estos estigmas o cánones y trabaja como pescadora día tras noche, es un modelo para futuras generaciones de jóvenes que deseen trabajar en esta área. Valdivia se encuentra en el hemisferio sur de América y se le apodo con el nombre de La Perla del sur. Valdivia es llamada la región número XIV de ríos, los pescadores se sienten atraídos por sus truchas de un gran tamaño. Usualmente recomiendan pescar con moscas secas aunque los salmones para trofeo están captando más la atención de los competidores. Nuestra pescadora de Valdivia no pesca por competencia, pesca por deber, para traer comida a la casa pero aun así lo hace con placer. Esta escort de Valdivia nos cuenta que cada mañana se levanta muy temprano a preparar los anzuelos para su próxima pesca. “Mi abuelo me enseño desde muy pequeña a ser autosuficiente, a valer me por mí misma. Yo lo acompañaba todos los días a pescar sin falta, amaba y todavía sigo amando el olor a pescado que trae consigo el del rio. Creo que mi amor por la pesca se afianzo por el amor que le tenía a mi abuelo, un gran pescador por cierto. Siempre perseguía a mi abuelo y le decía que algún día sería una gran pescadora como él y aquí me encuentro en Valdivia, siendo entrevistada por un periodista y con un premio por tener más de 20 años pescando. Aunque me alegre todo esto realmente lo único que quiero es volver a pescar junto a mi abuelo y escuchar sus historias de joven.